¿Por qué Race for Water? ¡Porque tiene sentido, desafortunadamente! Se lo debo a mis hijos, intentar detener esta espiral destructiva que hoy hace que la vida en la tierra sea cada vez más precaria. Ciertamente, dejo a mi familia, pero creo que ella ha entendido, que me atrevo a vivir la vida a la que estoy destinado, y que cuando papá regresa, es feliz (¡no es egoísmo!) Creo que mis hijos están muy orgullosos de mi actitud y de mis acciones. Como me dice mi hijo de 7 años: “Papá, ¿te marchas a salvar el planeta?” Creo que para mi es motivación suficiente…
Descubrí la práctica de la navegación a los 14 años en el club náutico de Carnac, navegando en un Dart un sábado por la mañana. Siempre me he sentido atraído por el océano, el mar en el que adoraba (y todavía adoro) bañarme; ¡pero no tenía acceso tanto como quería ya que no vivía en Armor sino en Argoat! Sin embargo, logré hacer algunos cursos de vela…
Luego llegó el momento del ejército, para mí una objeción de conciencia, donde pude obtener mis títulos de instructor de navegación y de vela ligera. Tuve una verdadera revelación durante mis primeras navegaciones en veleros de crucero en el seno de la asociación en la que realizaba esta objeción de conciencia … Cuando salí, me fui a hacer una travesía transatlántica. Cuando terminó esta odisea, estaba convencido de que mi vida estaría ligada al océano.
Me gradué, me profesionalicé… Para mí, evolucionar en el océano es una relación noble con la naturaleza, una sensación de libertad fantástica donde es imposible esconderse, donde la impostura no existe, bueno, eso creo…